Sobre el 1890, con motivo de la fundación de la Sociedad Ornitológica de Bâle, se organiza una exposición de canarios. Los visitantes pudieron admirar por primera vez canarios rizados. En esta época se les llamaba “Parisiens”. Su propietario era M. Gill de Francfort.
Vendió todos sus ejemplares a criadores suizos. Según las viejas crónicas el volvió con los bolsillos bien llenos. Vendió 12 parejas a 400 francos la pareja. Una crónica cuenta que en 1899 los aficionados a los canarios “parisiens” (sólo se conocía con ese nombre a los rizados) eran muy numerosos, sobre todo en la región de Bâle.
Poco a poco el deseo de nidificar de estos canarios rizados disminuía, de manera que se hizo necesario buscar sangre fresca en el extranjero y además los criadores se dieron cuenta de que era posible mejorar la raza mediante cruzamientos juiciosos.
Es en este momento cuando aparece también el nombre de “holandés”.Comienza una verdadera caza para encontrar el rizado ideal y muy a menudo, se pagaron precios exorbitantes por pájaros que venían de París, Roubaix, Lyon, St-Etienne, Gand, Strasbourg y más tarde también de Viena, Munich, etc.
Por estos cruzamientos hechos sin ningún criterio se llega a una gran mezcla y a una gran diversidad de tipos de canarios. Pero algunos criadores proponen la creación de un verdadero estándar de enjuiciamiento para este canario “holandés– parisien” Este primer estándar fue creado por MM. Hässig de Bâle; Lambert de Soleure et Zehle de Zurich. Fue aceptado oficialmente por una asamblea de criadores convocada específicamente para este fin en Baden. A partir de este momento comenzaba la verdadera selección del Rizado Suizo.
Por estos cruzamientos hechos sin ningún criterio se llega a una gran mezcla y a una gran diversidad de tipos de canarios. Pero algunos criadores proponen la creación de un verdadero estándar de enjuiciamiento para este canario “holandés– parisien” Este primer estándar fue creado por MM. Hässig de Bâle; Lambert de Soleure et Zehle de Zurich. Fue aceptado oficialmente por una asamblea de criadores convocada específicamente para este fin en Baden. A partir de este momento comenzaba la verdadera selección del Rizado Suizo.
Las importaciones no cesaron, pero los criadores no compraban cualquier cosa, adquirían aquellos sujetos que permitían mejorar la nueva raza y se dieron cuenta de que practicando una severa selección, y eliminando todos los sujetos que se alejaban del estándar, poco a poco los pájaros se iban aproximando más al estándar oficial de enjuiciamiento.
Y así, de esta manera, con el esfuerzo y la constancia de muchos criadores es como nace el Rizado Suizo.
Ángel Rodríguez Cardeña.
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